Beneficios de una alimentación saludable:
1. Te mantiene fuerte
Comer alimentos ricos en nutrientes y proteínas es fundamental para mantener los músculos fuertes. Por su parte, tanto a la vitamina D como a muchas de las B también se les atribuye propiedades que favorecen el aporte de energía.
Además, según una investigación publicada en la revista Diabetes Care consumir grasas y proteínas saludables junto con carbohidratos puede evitar que el azúcar en la sangre fluctúe y que tus niveles de energía se desplomen a media mañana.
2. Protege tu sistema inmunitario
El sistema inmunitario es la base de la salud. Su misión es protegerte de todo aquello potencialmente dañino, como virus y bacterias, atacándolos cuando entran en tu cuerpo.
Prestar atención a tu dieta es una buena manera de reducir la probabilidad de infecciones y prevenir resfriados, también será necesario adoptar medidas concretas como lavarse las manos con frecuencia y mantener una buena higiene.
3. Mantiene sana la piel
La piel es el órgano más grande de tu cuerpo y por tanto debes cuidarlo. Consumir vitaminas está asociado a la reducción de posibilidades de desarrollar cáncer de piel.
4. Previene la osteoporosis
Si quieres unos huesos fuertes, los productos lácteos, el pescado, las frutas y las verduras son indispensables en tu compra. Mantener la sal a raya también puede ayudar en su prevención.
5. Regula el tránsito intestinal
Las frutas, las verduras y los productos lácteos ricos en probióticos son siempre bien recibidos por las bacterias del tracto digestivo. Por su parte, los alimentos grasos y fritos no son nada recomendables.
6. Mejora tu estado de ánimo
Está comprobado que existen alimentos que contribuyen a mejorar tu estado de ánimo. La razón es que ayudan al organismo a segregar ciertas hormonas (endorfinas, serotonina) que provocan sensación de felicidad y bienestar.
De hecho, según un estudio expuesto en el congreso de la Asociación Americana de Psiquiatría celebrado en 2016, algunos alimentos podrían incluso contribuir a mejorar los síntomas de la depresión.
7. Reduce el estrés
Ciertos alimentos tienen la capacidad de moderar la producción de hormonas que inducen el estrés, tales como el cortisol y la adrenalina. Algunos de ellos como las naranjas contienen vitamina C, mientras que otros como el salmón son ricos en ácidos omega-3.
El chocolate negro aumenta el flujo sanguíneo del cerebro, influyendo de esta manera en el nivel de atención. Además, gracias a un estudio realizado en la Universidad de Clarkson se verificó que contribuye a reducir los efectos negativos de la cafeína (por ejemplo, el aumento de la ansiedad).
8. Mejora el rendimiento del cerebro
Una dieta rica en verduras, frutas, pescado y frutos secos, ayuda a reducir el deterioro de la memoria, la capacidad de concentración y otras funciones cerebrales.
Comer alimentos ricos en ácidos omega-3 como el pescado, las nueces y los aguacates se traduce en un mejor funcionamiento del cerebro y por tanto un mayor rendimiento y una mayor productividad en el trabajo.
Entrenar el cerebro supone un reto diario y constante en el que debes abandonar la zona de confort.
9. Protege el corazón
Algunos alimentos como los cereales integrales ayudan a reducir los niveles de colesterol malo, altamente perjudicial para el corazón. Una dieta saludable implica que es baja en sodio, por lo que seguirla contribuye a mantener la presión arterial en los niveles adecuados.
10. Ayuda a prevenir problemas oculares
Los alimentos ricos en antioxidantes juegan un papel importante en la prevención de dos problemas oculares comunes: las cataratas y la degeneración macular relacionada con la edad.
Ya sea a corto, medio o largo plazo, todo lo que comes tiene un impacto directo en tu organismo. Potencia los beneficios de una alimentación saludable manteniéndote hidratado, realizando alguna actividad física, no fumando y descansando adecuadamente. Tu cuerpo te lo agradecerá toda la vida.